Haciendo un poco de historia, tomo datos de la página Huelvapedia:
El 12 de noviembre de 1987 llego la Virgen al pueblo de Villanueva de las Cruces por vez primera.
La tarde de la fecha indicada, entre dos luces, todos los habitantes de la localidad fueron a recibirla a lo "alto de la tiesa"
con la primera intención de ver su cara y acompañarla por todas las
calles hasta llevarla a su iglesia donde se encuentra actualmente.
En 1.988, en el pueblo de se realiza por primera vez la Romería de Santa María de la Cruz en la
finca llamada "Tinagero" propiedad de Don José Motero. Se montaron unas chozas con palos, ramas y plásticos y allí se reunían
algunos amigos y desde entonces se formaron algunas peñas.En 1.989, Don Juan Alonso Bayo y su esposa Doña Catalina Gómez Calero ceden su finca llamada "Santa María".
"Allí seguimos con nuestros palos, ramas y plástico, durante varios años", dicen los lugareños.
A partir de 1.994
la celebración se traslada a la cerca de Don Benito y su hermana María
Rosario Gómez que gustosamente cedieron hasta que se encontrara un
sitio permanente.
El pasado día 23, veintiseis años despúes, tiene lugar una Procesión extraodinaria que recorre todas las calles del pueblo. Anteriormente tiene lugar la celebración de la Eucaristía en la esplanada delantera de la Parroquia, por el Vicario General Don Baldomero Rodríguez Carrasco, a la que asistieron numerosos devotos y representaciones de Hermandades de los pueblos vecinos.
A las 12 horas, entre los sones del Himno Nacional interpretados por nuestra Banda de Música, comienza un recorrido procesional que si bien estuvo amenazado por algunas gotas de lluvia, finalizó sin contratiempos y durante el cual, entre solemnes marchas procesionales, la devoción y entusiasmo vividos llenó las calles y corazones de los cruceños. El Presidente, Don Benito Medel y su Cabildo de Hermandad pudieron ver recompensado su trabajo para que todo el pueblo disfrutara de un gran día de fiesta.
Era la primera vez que la Banda de Música de Calañas paseaba sus sones
por las calles del pueblo vecino y podemos decir que la experiencia fue
cien por cien positiva.
Las atenciones durante el recorrido y al final del mismo, la seriedad
de la procesión y la alegría de los lugareños nos llenó de buenas
sensaciones y la música llegaba a todos los rincones del pueblo.
Felicitaciones muy bien recibidas por parte de la organización y muchos halagos que nos hicieron pasar una inolvidable jornada mariana.
CALAÑAS, 2013
